En una superficie pequeña, buscamos generar un espacio sofisticado y cuidado que sea capaz de proyectar la actividad de la empresa y que resulte atractivo desde la calle, sintiéndose como un escaparate. 

El local cuenta dentro con una división de volumetría irregular y mal aplomada, pero que encontramos como único aspecto interesante de la planta del mismo. Esto nos lleva a utilizar un recubrimiento que permite mantener la geometría rota de la pared, que divide los espacios de venta al público y almacén mediante una chapa minionda lacada en un llamativo color salmón. Además, recubrimos pavimentos, cambiamos la iluminación y realizamos un trabajo de pintura.